Se pelan y cortan las patatas en rodajas finas. Se fríen las patatas en abundante aceite caliente hasta que estén tiernas. Se retiran y se escurren bien.

En la misma sartén, se fríe la morcilla desmenuzada hasta que esté dorada.

En un bol grande, se baten los huevos con sal al gusto. Se añaden las patatas fritas y la morcilla, mezclando bien.

Se calienta un poco de aceite en una sartén antiadherente y se vierte la mezcla de huevos, patatas y morcilla. Se cocina a fuego medio hasta que la tortilla esté cuajada por un lado, luego se da la vuelta con la ayuda de un plato y se cocina por el otro lado hasta que esté completamente hecha.

¡Lista para servir y disfrutar!